martes, mayo 03, 2005

my treasure

Señores, tengo un don.
Hay veces que uno no sabe que lo tiene hasta que la vida lo pone a prueba. Y son esos fidedignos hechos los que destapan nuestra mente y dejan ver esa magia que conservamos sin saberlo. Y pensar que podríamos no darnos cuenta jamás de ese tesoro, ese regalo que la naturaleza nos dió.
Señores, hoy descubrí mi regalo. Hoy descubrí para que estoy hecho, para qué nací, por qué viviré y haciendo qué moriré. Y no es poca cosa.
No se imaginan cómo me quedaron esas croquetas de papa. Cuando iba por el puré ya lo vi venir... noté como mis manos hechaban la manteca necesaria para la perfección, esa papa estaba gozando de mis pisadas!! Puse el pan rallado en un plato... los dos (2) huevos batidos en otro. Y ahí empezó la magia...
Mis manos, lo supe, estaban hechas para hacer bolitas de ese puré. A medida que el procedimiento de empanar se completaba me di cuenta que esto era lo mío, mientras pasaba la papa por el huevo y el pan rallado notaba como las otras croquetas me observaban cálidamente desde el plato, asumo se dieron cuenta de mi don.
Por fortuna yo tambien, prometo no malgastarlo jamás, aunque funda la repostería en el intento.