domingo, abril 03, 2005

die, die my darling

La otra semana vi 2 películas que valen la pena ser vistas. Una de ellas es "Cómo hacer una película de amor", brasileña, del director José Roberto Torero. El film es una aparentemente rudimentaria sátira de las películas románticas hollywoodenses, sin embargo, Torero nos aproxima metalinguística y podríamos decir esquemáticamente al mundo de la producción de este género cinematográfico. Y nunca mejor dicho "producción", ya que el autor las ve nada más que como productos. Productos masivos que llegan y logran emocionar a casi todos por igual. De este modo, con un narrador omnisciente que va relatando el esquema, dirige un discurso que intenta por momentos advertir al espectador de que la película de amor no es más que un producto lucrativo, insensible y monótono, que maneja un lenguaje irreal pero común al género, pero que a su vez llama a todo individuo que quiera despegarse un poco de su semana (ver post DONT FUCKIN DO IT) haciéndolo ver siempre lo mismo. Me pareció buena película, bien presentados la mayoría de los clichés que hacen al romanticismo americano, con algunos chistes banales pero otros que parecen haber tenido mayor elaboración previa. No aparenta tener como objetivo a grandes cinéfilos, y eso tal vez es lo más rescatable de la obra. Me refiero a que se dirige hacia un público de bagaje cinematográfico medio, y eso hace que uno se afloje y no tenga que estar fijándose en el detalle porque de todas formas el narrador nos lo dirá tarde o temprano. Hace que el público medio crezca en un 1% y la próxima vez no pague para ver lo mismo, sino para ver otra cosa, algo que de verdad lo sorprenda.

La otra película es "Amor: primera parte", argentina, de los directores Alejandro Fadel, Martin Mauregui y otros (2 mas). Cabe remarcar las buenas actuaciones de la pareja protagonista (por suerte no son conocidos ninguno de los dos). Sin ahogar con irreverencias, muestra la algarabía primero y el deterioro después de una relación cualquiera. Cualquiera porque la plantea así, son dos personas cualesquiera, que se encuentran por la vida (pero recién la 4ta vez de cruzarse se enamoran... punto muy favorable del film) se juntan, la vida les sonríe, pero de a poco los puntos en contra se hacen evidentes y hasta quizas rutinarios y la relación va en declive hasta el final. Aunque la película sube y baja por momentos de alegría y tristeza (uno llega a pensar, pero pucha, que cagada), mi conclusión es que plantea una pseudo teoría del amor, desde una mirada lúdica y juvenil, que por supuesto escapa a toda seriedad documental. Rescato sin duda algunos flashbacks y algunos paréntesis que se muestran (dibujos de un hombre y una mujer y una voz de enciclopedia explicando las reacciones químicas que se generan en el cuerpo humano a la hora del enamoramiento, la penetración, la separación y demás) dentro de momentos específicos. Creo que esta película "romanticona" no se aplica de manera alguna al esquema de "Cómo hacer una película de amor", quizas por ser un planteo de las nuevas generaciones que se estan animando a agarrar cámaras y luces. Se opone al cuento de hadas, apela al ya viejo amor posmoderno o quizas posterior. Podríamos considerarlo como un relato sincero de lo que los autores sienten que es el amor, que en realidad no es lo que vemos en las películas, sino otra cosa, otra cosa que tal vez no se pueda controlar tan facil con un ramo de rosas o una serenata. Y es eso, algo opuesto al control, ajeno a lo mensurable y por que no, imposible de explicar.